Orange y Vodafone, los dos grandes competidores de Telefónica se personarán en los expedientes que abrirán las autoridades, ya que temen que la española ejerza una posición de dominio sin precedentes en el mercado de televisión e impida la libre competencia y el acceso a contenidos al controlar más del 80% del mercado.
Mediaset aceptará previsiblemente este viernes la oferta de Telefónica para comprarle el 22% que controla en Digital Plus, de forma que la operadora española se hará con el 100% del capital de la plataforma de televisión de pago. Pero sus dos grandes competidores, Orange y Vodafone, tratarán por todos los medios de pararla, porque según sus análisis, la operación de concentración dará al gigante que preside César Alierta el control de más del 80% del mercado de la televisión de pago en España.
Tanto Orange como Vodafone ya alertaron al Gobierno y a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) de los riesgos de la compra cuando Telefónica hizo la oferta en firme al grupo Prisa, por 725 millones de euros, a principios de mayo. La compra del 56% del capital le daría el control sobre el 78%, dado que Telefónica ya poseía el 22% de la plataforma, pero ahora la operadora se hará con el 100% si Mediaset da el «sí» a su oferta.
A partir de este viernes, cuando el consejo de Mediaset dé el plácet, se abre el proceso para que las autoridades de Competencia analicen y, en su caso, aprueben la operación. Y es ahí donde, según las fuentes consultadas, Orange y Vodafone jugarán sus cartas contra una operación de concentración de mercado, que según sus criterios, no cuenta con precedentes en toda Europa. En un principio lo harán, previsiblemente, ante las autoridades de Competencia de la Comisión Europea, porque la operación es de trascendencia comunitaria. La teleco gala y la británica, que también ofrecen a sus clientes paquetes con contenidos televisivos, se personarán en el expediente que se abrirá en Bruselas para analizar la compra.
Pero también podrían acabar personándose en Madrid, dado que el presidente de la CNMC, José María Marín Quemada, tiene la intención de reclamar para sí el análisis de la operación, que sin duda afecta primordialmente al mercado español. Telefónica es ahora la encargada de comunicar el acuerdo de compra a Bruselas y, a partir de ahí, el macroregulador español es competente para reclamar el traslado del expediente de España.
Sea donde fuere, Bruselas o Madrid, Orange considera que la posición de dominio de Telefónica en el mercado español podría «verse agravada» si la compra de Canal+ sale adelante, porque «supondría una operación de concentración con indudables impactos negativos para la competencia». Según los cálculos de Orange, Telefónica pasaría a controlar «más del 80% del mercado de televisión de pago y gran parte de los derechos audiovisuales en exclusiva». Para Orange, esto allanaría el camino para que Telefónica pueda «crear barreras de entrada infranqueables para los demás operadores, reforzando aún más su dominio de mercado y perjudicando seriamente la competencia».
La situación actual ya es preocupante, según Orange, porque Telefónica ofrece «contenidos exclusivos con condiciones no replicables por los operadores alternativos, empaquetados con servicios de telecomunicaciones». Orange recuerda que la CNMC ya tiene abierto un expediente sancionador por el que está investigando posibles infracciones derivadas de los acuerdos y concertación entre Distribuidora de Televisión Digital, S.A. (DTS), propietaria de los derechos del fútbol, y Telefónica en relación a canales como Canal+, Canal+ Liga o Canal+ Liga de Campeones. En dichos acuerdos, asegura la empresa gala, se estaría «discriminando de forma injustificada a otros operadores de televisión de pago».
Vodafone, por su parte, ve «elementos preocupantes» en la compra de Canal+ y ha pedido a las autoridades regulatorias el «máximo rigor y un escrutinio detallado» al analizar la operación. El gigante británico, con la compra de ONO, reforzará su posición en la distribución de contenidos televisivos a través de la banda ancha. Aún está por ver si al expediente que previsiblemente se abra por la CNMC también se incorporarán otras compañías afectadas como Jazztel, según el portal Voz Pópuli.