Un estudio de la Federación Catalana de Empresarios Instaladores de Telecomunicaciones (Feceminte) indica que, a fecha 10 de febrero, un 76% de los edificios catalanes que tenían que adaptar las antenas de TDT debido al dividendo digital ya lo habían hecho .
La patronal indica que, el 31 de marzo, cuando termina el proceso de liberación del espacio radioeléctrico en favor de la red de telefonía 4G, entre un 6 y un 8% de los edificios catalanes podría no haber realizado la antenización, de lo que verían limitada la recepción de contenidos de TDT.
En Cataluña son unos 182.000 edificios los que requerían una adaptación de sus sistemas de recepción de televisión, equipados con amplificadores monocanales o centralitas programables, lo que afectaba aproximadamente 2,3 millones de viviendas y más de 4 millones de catalanes. El resto sólo ha sintonizar su televisor para buscar la nueva ubicación de los canales.
Feceminte también explica que, a pesar de las empresas instaladoras han incrementado el ritmo de trabajo, algunas marcas no proveen al ritmo demandado, según las quejas recibidas de muchos profesionales.
Inicialmente, el plazo para realizar el proceso de reanitenitzación de la TDT terminaba el 31 de enero, pero ante la petición de usuarios, operadoras, fabricantes e instaladores, el Ministerio de Industria lo amplió hasta el 31 de marzo.