Televisiones, instaladores y usuarios muestran su preocupación por el retraso en la adaptación de los edificios ante la liberación del dividendo digital.
De acuerdo con los datos proporcionados el pasado lunes por el Ministerio de Industria, Energía y Turismo, a 31 de enero cerca de 500.000 edificios (487.649) habían realizado la adaptación de sus instalaciones, y poco más de 670.000 (672.488) comunidades de vecinos habían contratado ya la adaptación. Ello significa que, a esa fecha, más del 40% de los edificios todavía tenía pendiente la adaptación de sus antenas y que aproximadamente el 20% de las comunidades de propietarios, o bien no había aprobado aún el presupuesto de su realización, o ni siquiera había contactado con una empresa instaladora autorizada para solicitar dicho presupuesto.
Los indicadores de demanda futura, que tienen en cuenta las peticiones y aceptaciones de presupuestos de antenización, anticipan una preocupante ralentización si no se corrige la tendencia para la segunda quincena de febrero y el mes de marzo. Por ello, a poco más de un mes del apagón definitivo de los canales que cambian de ubicación con motivo de la liberación del dividendo digital, UTECA, el Consejo de Consumidores y Usuarios, FORTA, Abertis Telecom y FENITEL hacemos un llamamiento público sobre la importancia de aprovechar la prórroga concedida hasta el 31 de marzo y que no se demoren, en ningún caso, las decisiones de antenización en el seno de las comunidades de propietarios, de modo que el proceso se lleve a cabo sin generar perjuicios a los telespectadores ni a ninguno de los actores implicados.
Operadores, instaladores y usuarios hacemos hincapié en casos especialmente sensibles al retraso, como pueden ser las segundas residencias, las comunidades no administradas por profesionales o las comunidades con personas de mayor edad, y recordamos que el Gobierno ha dispuesto una partida de ayudas para sufragar los costes derivados de la adaptación y que éstas pueden alcanzar hasta los 550 € por edificio.
Asimismo, los firmantes nos hemos dirigido al Ministerio de Industria señalando la necesidad de poner en marcha, a la mayor brevedad, una intensa campaña de comunicación para informar y concienciar a los ciudadanos sobre la necesidad de la adaptación, ya que el análisis de las cifras recomienda que se siga ejerciendo una enérgica presión informativa entre los telespectadores, las comunidades de vecinos y los administradores de fincas, a fin de que el proceso de liberación se complete de forma satisfactoria.
