El Día Mundial de la Televisión se celebra el 21 de noviembre de cada año, en conmemoración de la fecha en que, en 1996, la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU) designó este día para reconocer la importancia global de este medio. Esta jornada fue establecida tras la realización, el 21 y 22 de noviembre de ese mismo año, del Primer Foro Mundial de la Televisión, un evento en el que destacadas figuras de los medios de comunicación se reunieron bajo los auspicios de la ONU para debatir sobre el papel creciente de la televisión en cuestiones clave como la paz, la seguridad, el desarrollo económico y social, y el intercambio cultural.
La Asamblea General de la ONU, en su resolución A/RES/51/205 de diciembre de 1996, reafirmó su compromiso con los principios de la Carta de las Naciones Unidas, promoviendo la libertad de información y el pluralismo de los medios. Asimismo, se subrayó la influencia cada vez más significativa de la televisión en los procesos de toma de decisiones, al poner en el centro de atención mundial conflictos y amenazas a la paz y la seguridad.
Orígenes de la Televisión
Aunque el Día Mundial de la Televisión se instituyó en 1996, la historia de este medio de comunicación se remonta a varios decenios atrás. A finales del siglo XIX, tras inventos que revolucionaron la sociedad como el teléfono, la radio o la fotografía, se sentaron las bases para el desarrollo de la televisión.
En 1884, el inventor alemán Paul Gottlieb Nipkow fue uno de los pioneros al crear el disco de Nipkow, un dispositivo con un disco giratorio y una fuente de luz con agujeros en espiral que permitía la transmisión de imágenes.
1925: La primera emisión televisiva
Basándose en las investigaciones de Nipkow, el escocés John Logie Baird logró en 1925 sincronizar dos discos de Nipkow sobre un único eje, dando lugar a la televisión electromecánica. El 2 de octubre de ese año, Baird realizó la primera transmisión televisiva, que mostró la cabeza de un muñeco. Esta emisión tuvo lugar en su laboratorio de Londres y fue la primera de la historia. Un año más tarde, Baird también desarrolló el primer receptor de televisión.
Otro avance clave en la evolución de la televisión vino del ingeniero estadounidense Vladimir Zworykin, quien inventó el iconoscopio, precursor de las cámaras de televisión modernas, y permitió la aparición de la televisión eléctrica. Este avance, junto con la tecnología de los tubos de rayos catódicos (CRT), mejoró la resolución y la calidad de las emisiones.
La disputa por la patente de la televisión electrónica
En 1927, Philo Farnsworth, un ingeniero estadounidense, presentó el primer televisor completamente electrónico. Esto desató una disputa legal con David Sarnoff, presidente de RCA, sobre la autoría de la televisión electrónica, que finalmente se resolvió a favor de Farnsworth.
Primeras emisiones regulares de televisión
Pese a las disputas sobre la patente, las primeras emisiones regulares de televisión comenzaron en 1936 con la BBC, que emitió en alta definición. Unos años después, en 1939, en el marco de la Feria Mundial de Nueva York, la NBC en Estados Unidos también inició sus transmisiones regulares. Curiosamente, el presidente Franklin D. Roosevelt se convirtió en el primer mandatario estadounidense en aparecer en televisión durante esta exposición.
Televisión en color
El concepto de la televisión en color fue explorado ya en 1928 por John Logie Baird, quien realizó las primeras demostraciones, aunque fueron experimentos iniciales. Sin embargo, la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI) reconoce al mexicano Guillermo González Camarena como el inventor de la televisión a color, gracias a sus desarrollos en 1940. En México, el 17 de febrero, fecha de su nacimiento en 1917, se celebra el Día del Inventor en su honor.
La televisión en España
En España, la televisión comenzó a dar sus primeros pasos en la década de 1940. En 1948, se llevó a cabo la primera prueba experimental de televisión, organizada por Philips en la Feria de Muestras de Barcelona. Sin embargo, las pruebas más significativas ocurrieron en los años 30, aunque de forma más rudimentaria.
Entre 1949 y 1956 continuaron las pruebas hasta que, en octubre de 1956, TVE (Televisión Española) comenzó a emitir su programación regular en abierto, aunque en ese momento había solo unos 600 televisores en todo el país. Desde sus inicios, con tres horas diarias de programación, la televisión española fue evolucionando, y en 1966 TVE lanzó su segundo canal, La 2.
La expansión de la televisión en España
Durante los primeros 25 años, TVE fue la única emisora en España. A partir de los años 80, con la creación de las televisiones autonómicas, la oferta televisiva se diversificó. La Ley del Tercer Canal de 1983 permitió la creación de las televisiones regionales, como ETB (País Vasco), TV3 (Cataluña), TVG (Galicia), Canal Sur (Andalucía) y Canal Nou (Comunidad Valenciana). Estas emisoras regionales se agruparon en FORTA, la Federación de Organismos de Radio y Televisión Autonómicos, que nació en 1989.
La televisión privada y digital en España
La Ley de Televisión Privada de 1988 marcó el inicio de la televisión privada en España, y en 1990 comenzaron a emitir las cadenas Antena 3, Telecinco y Canal+ (hoy Movistar Plus+). Posteriormente, en 2005 y 2006, se unieron Cuatro y La Sexta. Con la llegada de la Televisión Digital Terrestre (TDT) en el siglo XXI, la cantidad de canales de televisión en España creció considerablemente, diversificando aún más la oferta televisiva.
Hoy, España cuenta con una amplia variedad de cadenas, tanto públicas como privadas, lo que refleja el constante crecimiento y adaptación de la televisión a las nuevas realidades tecnológicas y sociales.