La Comisión Europea ha aprobado la fusión entre la operadora telefónica Orange y MásMóvil, pero bajo condiciones específicas diseñadas para prevenir una concentración excesiva en el mercado y garantizar el cumplimiento de la legislación comunitaria en materia de competencia.
Esta fusión marcará un hito en el panorama de las compañías telefónicas en España, ya que Orange , al superar los 30 millones de consumidores, pasará a ocupar el primer puesto, desplazando a Telefónica. Según un comunicado emitido este martes por la Comisión Europea, la operación dará lugar al mayor operador en número de clientes en el país.
Para asegurar la competencia en el mercado, Bruselas ha impuesto una serie de condiciones a la fusión. Una de ellas es que el nuevo grupo ceda parte de su espectro de bandas de frecuencia a otra empresa, Digi, el principal operador móvil virtual y el de más rápido crecimiento en España. Esto permitirá a Digi desarrollar su propia red móvil y ejercer una fuerte presión competitiva en el sector.
Además, el gigante resultante de la fusión estará obligado a ofrecer a Digi un acuerdo opcional de roaming en España, dado que es probable que la red de esta última no cubra todo el territorio nacional. De este modo, Digi tendrá la libertad de elegir entre utilizar los servicios de roaming de Orange y MásMóvil, mantener su actual proveedor mayorista, que es Telefónica, o incluso optar por la red de Vodafone en todo el país.