Cada año, el Día Mundial de la Televisión ofrece una buena ocasión para reflexionar sobre el papel de este medio en nuestras vidas.
Y los datos del Barómetro 2025 sobre la Percepción Social de la Televisión en Abierto, elaborado por Sigma Dos y Dos 30 para UTECA, llegan con un mensaje claro: la televisión no solo resiste frente a las redes sociales y las plataformas digitales, sino que se consolida como el eje central de confianza informativa para la sociedad española.
Según el estudio, el 93% de los encuestados considera que sin televisión, radio y prensa circularía mucha más desinformación.
Este dato —14 puntos más que el año anterior— refleja un respaldo sólido y transversal entre todas las edades, incluso entre los jóvenes de 18 a 34 años, donde la cifra asciende al 93,9%. La televisión, por tanto, se posiciona como un pilar clave en la lucha contra los bulos y las noticias falsas.
Más de la mitad de los ciudadanos aseguran que su principal estrategia frente a la desinformación es contrastar los datos a través de medios tradicionales. Tras ello, destacan evitar reenviar información no verificada (52,6%) y recurrir a plataformas de verificación (34,8%).
Un liderazgo que no cede terreno
Aunque el ecosistema informativo se ha diversificado, la brecha de credibilidad entre los medios convencionales y las redes sociales sigue siendo enorme.
La televisión lidera como el canal que ofrece información más veraz y contrastada (56,6%), seguida por la radio (46,5%) y la prensa (38,2%). Las redes sociales apenas alcanzan el 11,1%, y las plataformas digitales, un 4,5%.
En cuanto a consumo diario, el 68,4% de los españoles elige la televisión como su principal fuente de información, frente al 45,5% que opta por la prensa y el 36,9% por la radio.
En momentos de especial actualidad o crisis, esa preferencia sube hasta el 75,1%, mientras que las redes sociales se quedan en el 34,8%. Además, el 92,6% de los encuestados confía más en periodistas profesionales que en influencers, reforzando la importancia del rigor y la ética periodística.
Más allá de su función informativa, la televisión en abierto sigue siendo un elemento de cohesión social. El 79,4% de los ciudadanos cree que fomenta el sentimiento de comunidad, actuando como un espacio compartido donde todos los públicos pueden encontrarse.
Además, el 94,6% considera que la televisión gratuita es un bien de interés general, imprescindible para garantizar el acceso universal a contenidos de calidad, independientemente del nivel económico o social.
Seguridad y protección de los menores
El estudio también revela una brecha clara entre la televisión y el entorno digital en términos de seguridad infantil.
Los padres eligen la televisión como el canal más adecuado para el consumo independiente de sus hijos (55,3%), mientras que las redes sociales apenas llegan al 4,9%. Para un 85,8%, la televisión genera más tranquilidad que internet, y un 81,5% la considera más educativa.
Esa preocupación se traduce en una petición casi unánime: el 90,7% de los encuestados reclama que el nivel de control de contenidos y protección de menores que se exige a la televisión se aplique también al entorno digital.
Un medio que se transforma, pero no desaparece
En un panorama mediático marcado por la fragmentación de audiencias, el Barómetro UTECA 2025 demuestra que la televisión en abierto no solo sobrevive, sino que se reinventa.
Su papel como fuente fiable, espacio compartido y garante de acceso universal la mantiene como uno de los grandes pilares informativos y sociales de España.
