Un ciudadano sueco ha sido condenado a pagar 12 millones de coronas suecas (casi 1,4 millones de euros) en concepto de daños a cuatro empresas de televisión de pago después de que haya sido encontrado culpable de poseer y utilizar diversos decodificadores ilegales de televisión. El hombre, de 43 años de edad y residente en Norrköping, en el este del país, distribuía de forma ilegal entre sus más de 650 clientes la señal de Canal Digitaal, Viasat, Boxer y Com Hem.
El tribunal fue informado de que la operación se inició en 2004 y se llevó a cabo de forma conjunta por la parte demandada y un vecino. Durante estos años, el acusado fue creando la red de clientes y canalizando los fondos que recaudaba a través de una cuenta bancaria perteneciente a su madre.
El ahora declarado culpable fue descubierto en 2008, cuando en otra investigación la policía se extrañó del elevado número de ordenadores que había en el edificio.
A pesar de tener que pagar esa elevada multa, el ahora condenado se ha librado de entrar en prisión gracias a la gran cantidad de tiempo empleado por la policía para procesar el caso, que ha hecho prescribir la parte penal.
Esta es la segunda condena significativa en Suecia en las últimas semanas por piratería de televisión. En la anterior, el condenado fue multado con 37 millones de coronas suecas (más de 4,2 millones de euros).