La operadora española de satélites de telecomunicaciones Hispasat sigue manteniendo su posición destacada -número tres en el ránking europeo-, tras el lanzamiento del Amazonas 4A mediante un cohete Ariane 5.
El despegue se produjo el pasado 22 de marzo desde el centro europeo de Kourou, en la Guayana Francesa.
El plataforma, que supuso una inversión de 140 millones de euros, es el octavo satélite español lanzado por Arianespace. La compañía europea de lanzamiento de satélites ya puso en órbita el Hispasat 1A y el Hispasat 1B en 1992 y en 1993. En 2005 y 2006, Hispasat y su subsidiaria Hisdesat eligieron Arianespace para lanzar los satélites XTAR-Eur y Spainsat, a los que siguieron el Amazonas 2 y el Hispasat 1E en 2009 y en 2010, respectivamente. Arianespace también se ocupó del despegue del Amazonas 3 en febrero de 2013.
El Amazonas 4A fue la respuesta del Grupo Hispasat al reto de aportar en tiempo record capacidad espacial adicional en Latinoamérica para satisfacer el incremento en la demanda de servicios audiovisuales que se va a producir en Brasil con la celebración de los Juegos Olímpicos en Rio de Janeiro en 2016.
El satélite construido por la empresa estadounidense Orbital Sciences Corporation, utilizando una plataforma GEOStar-2.4, pesa unas tres toneladas y está equipado con 24 transpondedores en banda Ku. En su fabricación también contirbuyeron empresas españolas como Thales Alenia España, GMV, RYMSA, Indra, e INSA.
El Amazonas 4A se sitúa en la posición orbital de 61º Oeste, donde Hispasat ganó en mayo pasado nuevos derechos de explotación en banda Ku a través de su subidiaria brasileña Hispamar en una subasta abierta por el Gobierno de Brasil.
Un mes después del lanzamiento, Orbital detectó una avería en el subsistema eléctrico, lo que afectará a su capacidad, reduciendo su vida útil prevista para 15 años.
Hispasat actuó con celeridad y aplicó un plan de contingencia que incluía aprobar el diseño y construcción de un nuevo satélite, el Amazonas 5, cuyo despegue se prevé para 2017. Para 2015 planean la puesta en órbita del Amazonas 4B y del AG1, este último de última generación y propulsión eléctrica (foto).
La compañía, controlada por Abertis, tiene planes de expansión hacia el este del planeta y ha estado interesada en la compra de la operadora israelí SpaceCom.