Las familias españolas se declaran muy preocupadas por los contenidos que ven sus hijos en la televisión, pero, en cambio, apenas usan los sistemas de bloqueo de canales que ofrecen ya la mayoría de televisores.
Así lo refleja la última oleada del ‘Panel de hogares’ elaborado por la Comisión Nacional de Mercados y de la Competencia (CNMC), que señala que sólo el 47,5% de las familias con menores de edad afirman que conocen la existencia de medios para bloquear o filtrar los contenidos audiovisuales que ven los menores en su hogar. De estas, sólo el 14,9% tiene activada alguna opción de control parental en los aparatos de televisión.
En el caso de otros dispositivos, como el ordenador o la tableta, el porcentaje de hogares que activan sistemas de control parental es algo mayor: un 19,1% y 18,5%, respectivamente.
Siete de cada 10 hogares con hijos menores o que se hacen cargo de menores habitualmente afirman conocer que los contenidos emitidos por televisión cuentan con una calificación por edades. Dentro de este porcentaje, el 72,6% utiliza la señalización visual en la pantalla de televisión como medio para informarse sobre esa calificación de contenidos, y el resto de fuentes (página web del canal de televisión o guías electrónicas de programación) son poco utilizadas.
Según la CNMC, llama la atención las horas en las que los propios progenitores reconocen que es probable que haya menores de 12 años viendo la televisión sin compañía de un adulto durante los fines de semana.
En la franja de protección reforzada (de 9 a 12 horas en fin de semana según establece la Ley Audiovisual) son similares a los porcentajes fuera de la misma (de 16 a 20 horas).
En la franja de protección, los porcentajes de hogares que declaran que es probable que un menor esté solo viendo la televisión varían entre el 16% y el 26%, mientras que de las 16 a las 20 horas varían del 24% al 28%.
Sólo el 19,4% de los hogares con menores conoce la existencia de medios para reclamar o protestar sobre los contenidos que se emiten en televisión para niños y adolescentes. De estos, tan sólo el 2,8% ha reclamado o protestado en los dos últimos años.
Contenidos violentos
La presencia de contenidos violentos, que producen miedo o angustia y con escenas de sexo son los principales motivos de preocupación de los padres con hijos menores de 12 años.
La inquietud de los hogares es mayor cuanto más joven es el menor.
En el caso de niños hasta los 11 años, más de un 80% de los hogares con menores de esa edad se declara muy o bastante preocupado por casi todas las categorías de contenidos tratados en la encuesta. En cambio, cuando se trata de menores entre 12 y 17 años los porcentajes de hogares muy o bastante preocupados rondan el 60%-70%.
Respecto de las categorías que destacan por el grado de preocupación se encuentran los contenidos violentos, el sexo explícito y los contenidos que muestran conductas peligrosas que puedan ser imitadas por los jóvenes. Cuando los menores tienen hasta 6 años también causan inquietud los contenidos que pueden generar miedo y angustia.
La encuesta de esta tercera oleada del ‘Panel de hogares’ de la CNMC se llevó a cabo en el segundo trimestre de 2016 e incluyó a 4.685 hogares y 9.317 individuos.