La Policía Nacional ha detenido en Ciudad Real a dos hermanos por distribuir de forma ilícita contenidos de televisión de pago.
Los arrestados tenían una empresa que daba servicio a casi 3.000 clientes que se beneficiaban de los bajos precios ofrecidos de manera ilegal, lo que estaría reportando a los detenidos 500.000 euros anuales de beneficios.
En el registro realizado en el local los agentes encontraron la instalación desde donde se emitía la señal de televisión a todos sus abonados. La señal era facilitada por otro operador nacional que tampoco cuenta con licencia para su distribución y una vez descodificada era emitida en abierto para todos los abonados.
La investigación se inició en octubre de 2017, a raíz de la denuncia impuesta por LaLiga contra los responsables de una empresa. Se les acusaba de delitos contra la propiedad intelectual, contra los derechos de difusión televisiva de carácter condicional y de defraudación de las telecomunicaciones.
La empresa investigada contaba con una página web en la que promocionaban los diferentes servicios que ofrecían a los clientes, como telefonía, Internet y televisión. En esta publicidad no incluían referencia alguna a los partidos de fútbol de las competiciones organizadas por LaLiga, ya que no contaban con la autorización ni los derechos para poder emitir esos eventos deportivos.
Para la distribución de canales codificados es requisito imprescindible contar con la autorización de los legítimos titulares, condición con la que la empresa investigada no había cumplido.
Por ello el potencial lucro obtenido por el delito se incrementaba notablemente, ya que como reclamo para obtener clientes ofrecía esos canales a un precio menor que el ofertado por los portales legales.
