Cerca de 12 millones de internautas consumieron ilícitamente contenidos audiovisuales y deportivos durante el año pasado.
Esta práctica habría provocado una pérdidas para el sector audiovisual de 1.030 millones de euros. El dato supone un total del 9% de la facturación del mercado a nivel global, que fue de 11.600 millones de euros.
Son datos de un estudio sin precedentes desvelado por Hadopi, un organismo gubernamental francés que pretende regular y controlar Internet para perseguir las infracciones de copyright.
Encargada a la consultora PMP y a partir de los datos recogidos por Médiamétrie de más de 2.500 internautas en enero de 2020, la encuesta ha evaluado las pérdidas ocasionadas por la piratería en las distintas ofertas legales audiovisuales y deportivas.
Destrucción de puestos de trabajo
Mientras que las modalidades operativas más afectadas son las ventas físicas (310 millones de euros) y la venta de abonos de televisión de pago (260 millones de euros), las finanzas públicas se ven privadas de más de 320 millones de euros en ingresos fiscales. Se trata de IVA, cotizaciones sociales y patronales, impuesto de sociedades y sobre la renta, según el mencionado estudio.
La piratería también representa una potencial destrucción de 2.650 puestos de trabajo para los sectores afectados, ya muy debilitados por los efectos de la crisis sanitaria.
Si ciertas prácticas de piratería han disminuido drásticamente desde 2009, en particular la descarga a través de redes peer-to-peer (P2P), otras como el streaming y la descarga directa siguen siendo importantes o están experimentando un «progreso significativo».
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