Las operadoras de televisión en Hungría han urgido un plan contra las plataformas IPTV que consiste en lanzar ataques DDoS de denegación de acceso contra los sitios web que alojan estos servicios.
Así lo está proyectando la Asociación de Comunicaciones de Hungría (MKSZ). El objetivo es descubrir si es posible lanzar ataques DDoS contra los proveedores de IPTV mientras se disfruta de la protección de la ley. La premisa es que las autoridades del país deben designar una organización profesional adecuada, que estaría autorizada para atacar las direcciones IP de servicios ilegales detectadas.
El mismo grupo asegura que ha denunciado a más de un centenar de distribuidores ilegales a las autoridades en los últimos años, pero las investigaciones son lentas e ineficaces.
Desde 2018, solo se ha cerrado un caso y, aunque terminó con un veredicto de culpabilidad y una indemnización por daños y perjuicios, la sentencia de prisión suspendida de un año no fue suficiente para los titulares de derechos que buscaban enviar un mensaje disuasorio.
El mejor ataque es un contraataque. Básicamente se trata de ciberatacar a los propios piratas aunque se abre el debate se si es legal un ataque DDoS.
Se trata de colapsar a propósito un sitio web, plataforma o recurso a través del tráfico, haciendo que no opere bien o que directamente esté inoperativo debido al enorme tráfico que de repente sus servidores tienen que soportar.
Además, si se rastrea la dirección IP se puede repetir la misma operación hasta que el distribuidor desista y cese su actividad o pierda a sus clientes por la «pobre calidad» de su oferta.
