Cada año, la piratería en Internet cuesta a los titulares de derechos de todo el mundo miles de millones de dólares. En Suecia, el problema no ha recibido mucha atención hasta ahora, y el gobierno sueco ha anunciado una investigación al respecto, citando el hecho de que Suecia es uno de los países de la UE donde el problema es más grave.
«Queremos que la mayor cantidad de gente posible pueda ver el fútbol sueco de élite y, obviamente, es un problema cuando algunas personas eligen ver los partidos en sitios ilegales en lugar de hacerlo en nuestro titular de los derechos, Warner Bros Discovery». Es lo que ha dicho Jessica Linnman, gerente comercial de Svensk Elitfotboll, el organismo que representa a las dos principales ligas profesionales de Suecia.
Cada año, los suecos gastan un total de 1,25 millones de coronas suecas en IPTV ilegal. El uso se ha duplicado en los últimos tres años. Según Mediavision, 580.000 hogares suecos compran servicios de IPTV ilegales cada año.
“Los partidos que se retransmiten en diferentes sitios piratas son un gran problema para nosotros y estamos trabajando activamente para evitarlo”, afirmó Linnman. “El hecho de que el asunto se haya planteado a nivel gubernamental en Suecia y que ahora se haya iniciado una investigación es un paso en la dirección correcta para poder abordar los problemas”.
En Suecia, Warner Bros Discovery (WBD) posee los derechos de emisión de la Allsvenskan y la Superettan. WBD también acoge con satisfacción el hecho de que el asunto se haya planteado a nivel gubernamental en Suecia y que se haya iniciado una investigación.
“La IPTV ilegal es un problema grave para las empresas de entretenimiento, especialmente en los países nórdicos. Representa una amenaza para los usuarios que corren el riesgo de verse expuestos tanto a malware como a robo de identidad, perjudica económicamente al sector del entretenimiento e impide a los productores reinvertir en contenido nuevo y futuro. Estamos trabajando activamente para combatir estos servicios utilizando tanto medios legales como la cooperación internacional para interrumpir sus operaciones. El compromiso demostrado tanto por el gobierno sueco como por la Comisión Europea es alentador y seguiremos trabajando con ellos para proteger tanto a los consumidores como a los creadores y el contenido que crean”, confirmó Christina Sulebakk, vicepresidenta ejecutiva y directora general de WBD Nordics.
“El dinero que debería haber ido a parar a los titulares de los derechos va directamente a parar a los bolsillos de los delincuentes. Esto tiene consecuencias, por supuesto, para toda la industria cinematográfica y televisiva. Lamentablemente, Suecia es uno de los países de la UE donde este problema es más grave”, señaló la ministra de Cultura, Parisa Liljestrand, al anunciar la investigación.
