La cifra de usuarios detectados que utiliza de forma fraudulenta el sistema de cardsharing se acercaría a las 500.000 personas en España.
Se trata de un crecimiento constante, sin cifras oficiales exactas todavía, pero que algunas fuentes cifran entre 200.000 y 500.000 casos.
El ritmo de crecimiento del uso del cardsharing preocupa a los agentes afectados, como son las televisiones de pago o la Liga de Fútbol Profesional (LFP).
Y es que las emisiones de partidos de la liga española de fútbol son uno de los objetivos preferidos del sector de piratas.
En este sentido el artículo 270 del código penal prevé pequeñas penas de prisión para los importadores de los receptores que utilizan los usuarios para piratear la señal que emiten las plataformas de pago. Sin embargo, con la nueva modificación legal que entra en vigor el próximo 1 de julio, aumentarán las penas y se perseguirá tanto a los usuarios como a los enlazadores.
El cardsharing, el uso compartido de la tarjeta inteligente oficial de la televisión de pago, llegó a España en 2009. Pasó prácticamente inadvertido durante los primeros años, pero en los últimos tiempos se ha disparado su interés a través de foros de internet que explican cómo utilizarlo.
En los últimos meses han caído muchos servidores de cardsharing, como el IKS. En la mayoría de los casos, porque se han colapsado. A menudo se trata de sistemas preparados para asumir un tráfico de unos mil usuarios. También han aparecido batallas entre fabricantes de descodificadores.
