El cohete Proton-M, lanzado desde el cosmódromo de Baikonur, llevó a la trayectoria suborbital el satélite de comunicaciones británico Inmarsat 5F1.
Inmarsat 5F1 integrará la red de tres satélites, que junto a las estaciones de tierra formarán un sistema global de comunicación móvil por satélite Global Xpress. Las dos naves restantes se lanzarán en 2014.
El satélite de comunicaciones Inmarsat-5 F1 fue fabricado por la empresa estadounidense Boeing Satellite Systems por encargo de la británica Inmarsat Plc, operadora del aparato cuya vida útil proyectada es de 15 años.
Es el tercer satélite de la serie Inmarsat lanzado al espacio con la ayuda del impulsor ruso Proton.
Estos satélites proporcionan comunicación en todos los continentes excepto la Antártida. También, con la ayuda de este sistema, los gobiernos de diferentes países podrán intercambiar información sobre las situaciones de emergencia.