La piratería le costó a la economía italiana 1.100 millones de euros el año pasado. Así se desprende de un estudio de Ipsos para la Federación Italiana para la Protección del Contenido Audiovisual (FAPAV).
El impacto negativo en el PIB fue de casi 500 millones de euros. El Estado perdió otros 200 millones de euros en ingresos y unos 5.900 empleos se perdieron.
En 2019, las películas seguían siendo el contenido más pirateado (207 millones de acciones), pero el número de acciones de piratería disminuyó en un 34% interanual, mientras que la piratería de contenido deportivo aumentó en un 38%.
Un motivo de preocupación es el aumento de espectadores que vieron contenido a través de plataformas ilegales de IPTV. Fue del 10% a finales de 2019, y casi duplicando a 19% durante el cierre.
Además, ha habido un aumento en el uso de aplicaciones de mensajería (utilizadas por el 5% de los piratas) y las redes sociales (17%) como canales para descargar o acceder a contenido pirata.
Durante el bloqueo de Covid-19 de marzo a abril, el porcentaje de usuarios de piratería aumentó del 37% al 40% de la audiencia general, mientras que el número de actos ilegales de piratería aumentó de 69 millones a 243 millones.
En este período, la demanda de VoD en Italia aumentó en un 73%, siendo las series de televisión el género más visto (+62%).
En el lado positivo, el número de suscriptores de plataformas legales bajo demanda aumentó en un 8%, y el 76% planea continuar pagando por los contenidos.
