Conscientes de que la pitarería televisiva y por internet va a más, sobretodo en las transmisiones deportivas, el Parlamento Europeo está analizando la posibilidad que las mismas puedan cortarse en menos de 30 minutos.
Y es que según datos oficiales suministrados por las propias operadoras, éstas dejaron de ingresar 522 millones de euros por las retransmisiones deportivas piratas, entre ellas LaLiga.
En Europa se calcula que existen 7,6 millones de usuarios que acceden de forma ilegal a los contenidos pirateados a un precio más reducido del que cobra una operadora.
Con el paso del tiempo se están sofisticando los métodos de acceso hasta el punto de «ofrecer» la conexión a una IP con transmisiones deportivas. Ahora desde el Parlamento Europeo se está promoviendo una reforma legal para perseguir a estos delincuentes.
A pesar de que existen otros métodos legales para «cortar» la señal, el proceso en ocasiones es lento. Y es que una orden judicial puede tardar días o meses en ejecutarse.
Es por ello que la reforma de la Unión Europea propone crear una certificación que habilite a unos “alertadores fiables”. Estos serán responsables de reportar retransmisiones piratas. Una vez reportado por estos alertadores, el contenido ilegal se eliminaría o se haría inaccesible en no más de media hora. Además, se denunciaría a las autoridades para su persecución, algo que sería más sencillo si la Comisión Europea aprobase finalmente una directiva que sirviese de paraguas legal a todo el continente.
