El streaming ilegal pronto será sancionado con más severidad que el asesinato en Malasia.
Y es que el país asiático acaba de aprobar una ley que permitirá a la justicia decretar cárcel durante un periodo de 20 años a un pirata involucrado en las transmisiones ilegales por el sistema de IPTV.
La medida no solo se aplicará a las personas físicas. También los directores de empresas podrían ser encarcelados si su compañía es declarada responsable de una violación de la propiedad intelectual de las obras audiovisuales.
En cuanto a quienes «faciliten» la transmisión ilegal, por cualquier medio, también serán
cuestionados por los tribunales de Malasia.