Ya lo decíamos en la temporada pasada. Los servicios CCCAM (Client Card Conditional Module) van a la baja y cada vez más, según queda evidenciado gracias a las contramedidas técnicas que de nuevo a reanudado las plataformas de televisión de pago con el inicio de las competiciones de fútbol oficiales, como LaLiga. Todo con el objetivo de poner trabas a la piratería de sus señal y de unos derechos adquiridos de transmisión que valen millones de euros.
Ya hace unos meses las actuaciones policiales y judiciales dejaron fuera de servicio a las redes ilegales que distribuyen ilícitamente descodificadores de satélites y líneas CCCAM bajo suscripción a través del conocido cardsharing. Una vez configurado este sistema, los aparatos permiten el acceso a canales de televisión de pago de diferentes operadoras, todo ello a cambio de una cuota muy por debajo del precio oficial.
Las redes que aún quedan no lo están teniendo nada fácil para captar más clientes al comprobar que, sobretodo en los partidos de fútbol o transmisiones deportivas, son constantes los cortes que se producen en su recepción ilegal por satélite, una señal que sirve además para alimentar los IPTV piratas.
La prueba más reciente la tenemos ya en la primera jornada de LaLiga española de fútbol. La inestabilidad de las imágenes ha quedado palpable con constantes cortes e interrupciones en su recepción.
Nuevas fórmulas
Y es que al parecer, según apuntaron desde varios sectores, algunas informaciones, Movistar habría encontrado una fórmula para luchar contra la piratería de contenidos protegidos. Este sistema se activa justo en el momento del inicio de un partido, cuando mayor número de usuarios se conectan con una reprogramación del CAS que no permite desencriptar la señal en los receptores oficiales de la plataforma. Con ello se cosigue «apagar» la señal durante varios segundos, los suficientes para «molestar» al usuario de la misma.
Fuera de España también se llevan a cabo mediadas parecidas como por ejemplo en Portugal con los canales Sport TV y Eleven Sports que se distribuyen a través del satélite Hispasat 30-W6 (30º Oeste).