beIN Sports seguirá transmitiendo todos los partidos de la Premier League inglesa de fútbol en Oriente Medio por tres años más, en medio de una prolongada disputa con Arabia Saudí sobre la piratería de su señal.
beIN Sports, con sede en Doha, ha buscado por la vía penal que se prohíba a las autoridades saudíes facilitar presuntamente el robo de su señal como parte del poder del boicot económico y diplomático impuesto por los países del Golfo a Qatar.
La disputa contribuyó al fracaso de un intento del fondo soberano de inversión de Arabia Saudí de comprar al club inglés Newcastle este mismo año.
Arabia Saudí se preparaba para lanzar su propia oferta para transmitir partidos en la región, pero la Premier League ha acordado otorgar a la cadena de Qatar otro acuerdo de 500 millones de dólares por tres años más por los derechos de transmisión de todos los 380 partidos en Oriente Médio y África del Norte, de 2022 a 2025.
beIN Sports no tiene autorización para operar en Arabia Saudí, que este año fue acusado por la Organización Mundial del Comercio (OMS) de facilitar la piratería al bloquear los intentos para impedir el robo de señal de la emisora ilegal beoutQ.
Arabia Saudí rompió relaciones con Qatar en 2017 junto con los Emiratos Árabes Unidos y Bahréin debido a acusaciones de que Doha respalda el extremismo.
