La televisión batió en el Reino Unido un récord de facturación publicitaria en 2011, con un aumento del 2,2% respecto a 2010 que elevó los ingresos hasta los 5.223 millones de euros.
Este récord obedece sobre todo al desembarco en la pequeña pantalla por primera vez de campañas publicitarias de gigantes de Internet como Google y la web de descuentos Groupon. Google, que históricamente ha rehuido la publicidad televisiva, destinó a este capítulo el año pasado 6,23 millones de euros, el 23% de su inversión total en anuncios en las islas, según datos de Nielsen recogidos por ‘The Guardian’.
Thinkbox, el órgano que gestiona el márketing de los principales operadores comerciales de televisión, ha resaltado la importancia de esta nueva marca en la facturación publicitaria, toda vez que el año pasado ya se registró un crecimiento del 16% tras la recesión que hacía complicado lograr esta nueva subida.
«Este récord muestra un reconocimiento de los anunciantes en la capacidad de la televisión para aportar rentabilidad a sus negocios», señala el director ejecutivo de Thinkbox, Tess Alps. Por sectores, el de telecomunicaciones aumentó su gasto en publicidad un 28,8%, el de viajes y transporte un 27% y el de las webs comparativas de precios un 21,5%. Los buenos vientos que soplan para la caja publicitaria de la televisión británica contrastan con los malos resultados que registra su ‘hermana’ española por culpa de la crisis, que ingresó de media en 2011 un 9,5% menos en 2011, con un volumen de 2.237,2 millones de euros, según Infoadex.
Las ganancias de las televisiones nacionales españolas en abierto retrocedieron un 7,1% (hasta caer a los 1.977 millones) y las de las autonómicas un 27,4% menos, hasta los 198 millones.
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