El Gobierno destinará 7,5 millones de euros a lo largo de 2013 en dos campañas de comunicación dirigidas a explicar el segundo ‘apagón’ de la TDT, que supondrá la mudanza de algunos canales de televisión de unas frecuencias a otras con el objetivo de dejar espacio libre para la llegada de la nueva tecnología de conexión móvil 4G a España, lo que se conoce como liberación del ‘dividendo digital’.
Así, en el ‘Plan de Publicidad y Comunicación Institucional 2013’ aprobado por el Consejo de Ministros este viernes está previsto una primera campaña para dar a conocer el ‘dividendo digital’ entre el 1 de enero y el 30 de abril de 2013, valorada en 2,5 millones de euros, y una segunda campaña con el mismo objetivo, entre el 1 de mayo y el 31 de diciembre de 2013, con un coste de 5 millones de euros. Las campañas se emitirán en televisión, radio, prensa, revistas, internet y exterior en todo el territorio nacional.
En el plan diseñado por el anterior Ejecutivo estaba previsto que este segundo ‘apagón’ de la TDT se produjera para el 1 de enero de 2015. Sin embargo, el Ministerio de Industria ha decidido adelantar esa fecha hasta el 1 de enero de 2014, por lo que en los próximos meses las cadenas deberán comenzar la mudanza para que la banda de frecuencias 790-862 MHz quede libre para que puedan utilizarla las empresas de telecomunicaciones.
Este cambio de frecuencias, que afecta a cadenas de todos los operadores privados (Antena 3, Telecinco, Cuatro, Net TV, Veo Tv y La Sexta), implicará que unos 1,2 millones de edificios en España tengan que modificar sus antenas para continuar viendo todos los canales de la TDT.
Con el objetivo de que esta mudanza no pille por improviso a los televidentes, las dos campañas presupuestadas por Industria pretenden servir para «divulgar las actuaciones a desarrollar para la liberación del ‘dividendo digital’, informando a la ciudadanía sobre las tareas a realizar para la resintonización de sus equipos de televisión y para la adaptación de las instalaciones de recepción comunitarias, cuando sea necesario», según el pliegue técnico del primer plan de comunicación .
Este segundo ‘apagón’ de la TDT tiene un coste de alrededor de 300 millones de euros, según las previsiones del Ministerio de Industria. La mayoría de ese gasto tendrá que ser asumido por las comunidades de vecinos, con un coste de unos 20 euros por vivienda en los casos en los que se tenga que resintonizar las antenas comunitarias para seguir viendo todas las cadenas de televisión.
Mientras, el Ejecutivo costeará el gasto de las campañas de información (7,5 millones de euros), que se comen la mayoría de los 10 millones de euros incluidos en los Presupuestos Generales del Estado (PSG) para este tema y que ya adelantó en octubre el secretario de Estado y para la Sociedad de la Información (Setsi), Víctor Calvo Sotelo.
El esfuerzo previsto por el Gobierno para informar a través de estas dos campañas del ‘dividendo digital’ se ha colado, de hecho, entre las iniciativas más caras que va a llevar a cabo el Gobierno en 2013 dentro de su ‘Plan de Publicidad y Comunicación Institucional’.
Los 7,5 millones previstos para informar de este tema sólo son superados por la campaña de seguridad vial de la Dirección General de Tráfico (10,2 millones de euros) y supera a campañas como la dirigida a las Fuerzas Armadas (3,2 millones de euros) o informar sobre la estrategia de emprendimiento y empleo joven, contrato formación y aprendizaje y formación (2,5 millones de euros), que copan el ‘ranking’ de campañas más caras este año.
Negociación con el sector
En el plan inicial desarrollado por el anterior Ejecutivo socialista, los gastos de liberar el ‘dividendo digital’ iban a ser asumidos en su totalidad por el Gobierno, con los alrededor de 1.800 millones de euros que desembolsaron las empresas de telecomunicaciones por hacerse con estas frecuencias. Sin embargo, debido a la actual coyuntura económica, el Ejecutivo ya anunció que no iba a poder sufragar el coste de antenización y dejó en el aire las ayudas, también previstas, a las televisiones.
Precisamente, la falta de un compromiso explícito por parte del Gobierno de invertir en campañas de comunicación para dar a conocer con suficiente antelación a lo que implica el segundo ‘apagón’ sumado a que el Ejecutivo tampoco garantizó a las televisiones que fuera a sufragar el ‘simulcast’ -es decir, el coste de emitir en dos frecuencias durante un tiempo para dar tiempo a los espectadores a adaptar sus antenas- provocó que las televisiones rechazaran el plan del Gobierno en noviembre de 2012 después de haber llegado a un acuerdo en verano.
Actualmente, el Ejecutivo continúa negociando tanto con las cadenas de televisiones como con el resto del sector audiovisual con el objetivo de desbloquear la situación y comenzar el proceso para que el ‘dividendo digital’ esté libre a principios de 2014.