La cadena de televisión beIN Sports se ha defendido de las sospechas de corrupción que afectan al responsable del canal, el presidente del París Saint-Germain, Nasser Al-Khelaïfi.
«Bein Media Group niega todas las acusaciones vertidas. El grupo colaborará totalmente con las autoridades y aguarda con serenidad las nuevas etapas de la investigación», señala en un comunicada.
La Fiscalía francesa ordenó un registro de la sede de beIN Sports Francia, dirigida por Al-Khelaïfi, imputado por la justicia suiza por atribución irregular de los derechos de retransmisión de los Mundiales de fútbol.
La Fiscalía indicó que la operación se desarrolló en coordinación con sus colegas suizos, que comunicaron esta mañana la apertura de diligencias penales contra el presidente del PSG, contra el exsecretario general de la FIFA Jérôme Valcke y contra una tercera persona.
Al Khelaïfi y Valcke están siendo investigados por corrupción, gestión desleal, fraude y estafa, junto a un «hombre de negocios activo en el área de los derechos deportivos», según la Fiscalía suiza.
En el caso de Valcke, que ya está suspendido por la Comisión de Ética de la FIFA por corrupción, la justicia suiza sospecha que pudo haber recibido sobornos del hombre de negocios no citado para otorgar los derechos televisivos en varios países de los Mundiales de 2018, 2022, 2026 y 2030.
En el caso de Al Khelaïfi, que combina su labor al frente del PSG con la dirección de BEIN MEDIA GROUP LLC, la investigación se centra en la atribución de la retransmisión de los Mundiales de 2026 y 2030.