Hasta 13,7 millones de ciudadanos de la Unión Europea estarían accediendo a los contenidos de la televisión de pago mediante lo que se conoce como protocolo de Internet no autorizado, IPTV.
Este dato supone que los infractores ganan 941,7 millones de euros al año.
Así lo indicaba hace unos meses un estudio publicado por la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO), con sede en Alicante.
Esta práctica puede realizarse a través de pagos únicos, adquiriendo descodificadores ilegales, o mediante abonos a largo plazo vendidos por minoristas no autorizados. Es lo que señalaba la EUIPO. Según el informe, el usuario único intermedio en la Unión Europea gastaría unis 5,74 euros al mes en IPTV no autorizada.
El informe sobre la IPTV ilegal en la Unión Europea ofrecía los primeros resultados de la evaluación de la magnitud del IPTV ilegal en el conjunto de la Unión Europea. En él se recogían los usuarios activos y los ingresos ilegales obtenidos a través de actividades ilícitas.
Con este estudio, la Oficina de Propiedad Intelectual examina el consumo de contenidos que vulneran los derechos de autor en los 28 Estados miembros de la Unión Europea.
Lo hace para programas de televisión, música y cine a los que se accede a través de diversos métodos. Son todos aquellos que funcionan desde dispositivos de sobremesa como teléfonos móviles. Aquí se incluye la transmisión por streaming en directo, la descarga, los archivos ‘torrents’ y los programas de copiado (ripping).
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